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L'hiver est à venir...




jueves, 26 de julio de 2012

De Guatemala a Guatepeor, y de Guatepeor a una fantasía terrorífica y espantosa.

Os juro que me siento como Matt en Chronicle. ¿Habéis visto Chronicle?
Todo es precioso al principio, un canto a la frase "Impossible is nothing", una historia alucinante y hermosa. Después, todo se arruina. No tengo muy claro todo, es caótico, pero perfecto. Perfecto en el sentido de perfectamente espantoso. Tras esa etapa, viene el horror, donde no sabes lo que es cierto, ni lo que es mentira. Donde el límite de lo que habías imaginado y lo que sucede en la realidad es demasiado borroso.
Lo único que veo que podría animar a alguien egoísta, es que yo no soy el núcleo de la situación. Eso me aliviaría, si no fuese porque las personas que sí lo son, son aquellas por las que uno daría la vida. Por las que uno diría "Moriría ahora mismo para que no tuvieses que pasar por esto". Personas que, si hay algo que merecen de verdad, es la felicidad. La vida no es justa, el mundo no es justo... Estoy realmente harta de repetir esas frases. ¡Pero es que no van a arreglar nada! ¡Hablar o llorar simplemente es una forma de hundirte en tu propio agujero!
Es la risa lo que te va a devolver la alegría, es enfrentarse a ello con todas tus fuerzas y decir: "Es mi vida, y mi vida no la arruina nadie. Pienso hacer con ella lo que me haga feliz, y no importa lo que digan, piensen o hagan los demás".
El problema viene ahora; ¿QUÉ DEMONIOS HAY QUE HACER PARA CONSEGUIR QUE ALGUIEN TE ESCUCHE?
No lo sé. Como somos jóvenes, no sabemos razonar, no tenemos opinión propia, no sabemos lo que es el amor, ni lo que es defenderlo. Eso creen. Eso creéis. Que no podemos hacer todas esas cosas. Pero lo hacemos, y mejor de lo que nadie pueda hacerlo. Si tú dices que sabes, y puedes defender lo que quieres, ¡es que puedes!

Se acabó. Se acabó el llorar, el quejarse. Se acabaron las palabras, las caras de pena. Las miradas vacías. Se acabó. Solo nos queda levantarnos, limpiarnos el polvo y las lágrimas, dar un paso adelante y gritar con fuerza que las barreras, las fronteras, los obstáculos,... no existen. Son imaginarios, y que mi imaginación es demasiado fuerte como para dejar que se modele ella sola.

A partir de hoy, cada uno es capitán de su barco, y de su vida.

Cali.

2 comentarios:

  1. Hola! No se si me recuerdas, soy Laura o Leesa, de Aura Azul, solo queria decirte que después de tanto tiempo voy a volver a publicar A Dos Pasos del Infierno en mi blog, ¡besos!

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  2. ¡Hola! ¡Pues claro que me acuerdo de ti! Ya se te echaba de menos! Pues me voy a pasar ahora mismo! Madre mía, ¿cómo te va? ¿Y ese proyecto de la publicación en papel de A Dos Pasos del Infierno?

    Espero que todo vaya bien, besos,

    Cali.

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Muchas gracias por dejar tu sueño en nuestra pequeña nube.